Autor: Equipo Técnico Desab

El clima adverso que estamos transcurriendo en lo que va de la campaña parece ser el principal problema a enfrentar por el sector agropecuario, un inició de campaña complejo que llevó a cambios de estrategia continua con una escasez marcada de lluvias en gran parte de la principal región agrícola argentina La región núcleo, en su mayor parte, tuvo una disminución importante de las precipitaciones con respecto a  los registros históricos en el último trimestre del año. Esto se acentúa en el este bonaerense y el sur de Santa Fe. 

El fenómeno de la Niña se ha extendido por tercera campaña consecutiva y en consecuencia hay escasas reservas de agua en el perfil del suelo. Estos 2 factores explican las dificultades en el desarrollo de la siembra gruesa y genera una merma en el potencial de rendimiento de los cultivos.

El 1° día de 2023 se registraron precipitaciones pero muy variables en milímetros en distancias bastante cortas, siendo escasas en muchos lugares. Si comparamos el desarrollo de los cultivos entre esta campaña y la anterior mediante imágenes de índice verde observamos una gran diferencia en los valores obtenidos entre una imagen y la otra, esto grafica visualmente la situación de sequía que estamos atravesando. 

Analicemos el estado de los diferentes cultivos:

Maíz temprano: los pocos lotes sembrados en septiembre y octubre están en plena floración. La situación general de estos lotes es compleja con pérdidas de rendimiento, ya que están atravesando el período crítico en situación de estrés severo.

Soja de primera: el cultivo está entrando en plena floración y si bien la situación hídrica de los lotes es crítica, el cultivo tiene aún recorrido para su recuperación de darse registros de  lluvias más abundantes en enero. Muchos lotes fueron sembrados sobre final del año, mucho más tarde que su fecha óptima.

Soja de segunda: La emergencia no fue como se esperaba llevando  incluso  en muchos lotes a pensar en una resiembra. La ocurrencia de «cancro por calor» afectó considerablemente el stand de plantas y determinó la necesidad de resembrar los lotes, muchas de las cuáles están pendientes de realizar esperando a que se den las condiciones propicias.

Maíz tardío: hoy son los mejores lotes, están en V5/6 y aún con bajos requerimientos hídricos. Se espera que haya mejoras en las condiciones climáticas para cuando entren en la fase de rápido crecimiento. Se observa un bajo porcentaje de plantas con problemas de rootless  provocando una deficiencia en el anclaje de los materiales y la caída de los mismos.

En lo que respecta a plagas, se observa la presencia de algunas orugas bolilleras en los lotes de soja de segunda, lo que obliga estar atentos a la necesidad de control. En sojas más avanzadas la presencia de arañuela roja es cada vez mayor, en algunos casos con necesidad de realizar controles químicos. En lotes de maíz tardío se empezó a ver daños por gusano cogollero pero estos aún están bajo el umbral de control.

La  lluvia  caída esta semana da un pequeño alivio en algunas zonas para seguir esperando más precipitaciones que carguen el perfil y permitan lograr un buen desarrollo de los cultivos en sus etapas reproductivas.